PRESENTACIÓN LIBRO DE
AMORINA BURGENIK


Este primer libro de Amorina Burgenik, líder del Ministerio Para Personas con Capacidades Diferentes de la Iglesia Comunidad Vida Nueva, de Buenos Aires, Argentina, sierva del Señor, trata acerca de quienes son la principal motivación de su ministerio: las personas con discapacidad o, como ella nos enseña a nombrar, las personas con capacidades diferentes. Su intención es conmover nuestro corazón y movernos a misericordia por aquellos que padecen un grave impedimento sensorial, como ceguera o sordera; dificultades de la movilidad, en el caso de las personas con diversas parálisis y trastornos motores; déficit intelectual como las que nacen con un retraso mental, síndrome de Down, autismo, con daño intelectual o que se encuentran perturbados mentalmente por alguna enfermedad psiquiátrica; y las numerosas formas que toma la discapacidad, tales como el mal de Alzheimer, la esquizofrenia, las fobias, los trastornos del pánico y de ansiedad, etc.
Todas estas personas son fuertemente rechazadas y aisladas de la sociedad, relegadas a instituciones y en ocasiones, excluidas aún de sus familias. Lamentablemente muchas veces la Iglesia hace otro tanto, no considerándolas en sus planes de evangelización, discipulado y servicio. Parece que en contra de ellos hay una "discapacidad" mayor, la de nuestros corazones.
Está dirigido el texto tanto a las familias de los que portan la discapacidad como a todos los cristianos que pueden transformarse en evangelizadores y servidores de aquellos hermanos discapacitados que con grandes dificultades participan en la Iglesia. Con gran amor pero firmeza, la autora toca la conciencia del lector y acusa nuestra insensibilidad y falta de preparación para integrarles activamente en la vida eclesial.

Conmueve el testimonio personal de su llamado a no abandonar el país para evangelizar tierras lejanas, sino quedarse con aquellos que están cerca pero muy lejos debido a su discapacidad y son los menos alcanzados, el país de las personas con discapacidad, un pueblo que no ve, que no escucha, que se mueve con dificultad, que a veces no comprende como el común de las personas, pero que tiene sed y hambre del Evangelio.

Es un libro entretenido y de lenguaje ágil, que nos enseña quienes son estas personas y como debemos prepararnos, estudiar y capacitarnos para llegar a ellas. "Así como no se nos ocurriría ir a predicar a Arabia sin saber árabe -argumenta la hermana Amorina-, si vamos a ingresar al mundo de la discapacidad, debemos zambullirnos en sus costumbres y por sobre todas las cosas, tratar de pensar como ellos."

La hermana Burgenik, reune útil información para cada edad en el desarrollo de los niños con necesidades especiales; habla de las etapas por las que pasa la familia en su enfrentamiento del déficit, antes de llegar a la aceptación y enfatiza que "Si deseamos llegar a ellos debemos desechar la lástima." Quien desee ayudar efectivamente en su desarrollo e integración social a una persona con discapacidad, tendrá que madurar en su amor desde toda forma de rechazo o sobreprotección hacia un concepto de servicio auténticamente cristiano.

Contiene el libro interesantes datos y sugerencias prácticas para ayudar a los distintos tipos de discapacidad: nos enseña como el templo debe estar preparado para recibirlos; la importancia de contar en la iglesia con una biblioteca parlante; la necesidad de involucrar al resto de la congregación en esta cruzada de inserción de los hermanos diferentes; da ideas de cómo la iglesia puede ayudar a los centros de atención de discapacitados que hay en la ciudad, ofreciendo distintos servicios en ocasiones especiales; como la escuela dominical debe estar preparada para recibir niños en sillas de ruedas, por lo cual habrá que hacer adecuaciones como construir un sanitario para ellos y rampas para que el acceso sea sin dificultades; etc. Nos resulta novedoso el sistema de evangelización con la presentación de cinco colores que ella propone para las personas con trastornos de visión.
Contiene explicaciones sencillas sobre sus causas y clasificación, las consecuencias sicológicas y en el comportamiento. No es un cesudo libro técnico, sino un práctico manual introductorio a la problemática de la discapacidad, dirigido especialmente a los cristianos que deseen evangelizar y servir a las personas con discapacidad. Al hermano que en otras latitudes se interese en levantar una obra de este tipo, ella anima pero advierte que "éste no es un ministerio exitoso en número y fama."
Si al terminar de leer este libro usted decide ser ojos para los ciegos, voz de los que no pueden hablar, oidos de los que no escuchan o pies para los que no pueden caminar; recibirá de parte de Dios toda la unción para llevar a cabo esa misión y este texto podrá ser un excelente manual para cumplirla.
Si al término de su lectura usted toma sobre sí el llamado del Señor de ser el buen samaritano de aquel que ha sido herido por la discapacidad y despreciado por otros, usted no sólo estará obedeciendo al mandato del Señor Jesucristo al preguntar al maestro de la ley: "¿Quién, pues, de estos tres te parece que fue el prójimo del que cayó en manos de los ladrones?" Recuerde que este respondió: "El que usó de misericordia con él." Y entonces Jesús le dijo: "Ve, y haz tú lo mismo". Si usted decide hacerlo así, se habrá cumplido el propósito de este libro.
Pero también el ejemplo y la enseñanza de la hermana Amorina Burgenik habrá dejado de ser ese bello slogan "La gente con discapacidad... ¡también puede conocer a Jesus!" para transformarse en verdadero rhema, palabra de Dios vivida con poder.

Iván Tapia Contardo
Especialista en Educación de Ciegos
Fundador del Ministerio del Buen Samaritano

 

DESARROLLO MOTRIZ DE LAS PERSONAS CIEGAS.


Carla Cares
Alumna de 4º año de Educación Diferencial año 2003
Carrera de Trastornos de Audición y Lenguaje
Instituto Helen Keller, Valparaíso, Chile.




En el presente trabajo se da a conocer la realidad que presenta el niño discapacitado visual en lo que se refiere al aspecto motriz. Desde que nace o desde que pierde la visión debe ser capacitado para conocer y mover su cuerpo, superando toda torpeza motriz.

El desarrollo motriz es el desarrollo del movimiento, parte del desarrollo humano integral. Vincula el crecimiento físico, la técnica motriz esencial, el desarrollo de la aptitud física y de la percepción motriz y factores biológicos, sociales y ambientales. El niño visualmente impedido progresa normalmente desde el punto de vista fisiológico, a través de sucesivas etapas del desarrollo motor, pero su impedimento visual parece ser causa de su retraso evolutivo.

Por lo general los niños ciegos presentan dificultad para adquirir conceptos sobre orientación en el espacio, los cuales son necesarios para lograr eficiencia en los movimientos locomotrices y en la movilidad independiente.

LA PRIMERA INFANCIA.A pesar que no hay mucha información sobre el desarrollo motor de los niños ciegos en la primera infancia, consideramos importante describir las habilidades que presentan y en las edades en las cuales deberían lograrlas, en relación a una persona con visión normal.

Según Fraiberg (1977), Norris y otros (1957), la ceguera presenta un efecto negativo no sólo referido a la motricidad gruesa (sedestación, marcha, gateo) sino que también a la fina (precisión y manejo de objetos). Por ejemplo, la capacidad de marcha de un niño ciego comienza después de los 24 meses de edad, a diferencia del normovisual que se inicia frecuentemente alrededor de los 14 meses.

Además de la visión, parece que las pautas de crianza y la calidad de la relación de los padres y el hijo pueden ser un factor para el desarrollo motor del niño. Esto puede tener un efecto, tanto directo como indirecto, pues a una mayor interacción con el padre y la madre el menor logrará una mayor estimulación y manejo de los objetos (Fraiberg 1971).

OBJETIVOS BÁSICOS DE LA ESTIMULACIÓN PRECOZ.
Los expertos en Estimulación Temprana o Precoz consideran los siguientes propósitos básicos:
1) Estimulación psicomotriz para facilitar las habilidades de exploración del entorno, manipulación, orientación y movilidad.
2) Estimulación multisensorial para la mejor utilización de la información recibida del medio.
3) Estimulación refleja: el niño con discapacidad visual nace con todo su bagaje de reflejos como el niño normovisual. Posee al momento de nacer todos los reflejos arcaicos. En la mayoría de las afecciones que determinan trastornos visuales, el reflejo palpebral, reacciona sólo ante estímulos mecánicos (soplo, viento, ruido) y no responde a los lumínicos como en el niño normovisual. Se lo se estimulará en la adquisición de los reflejos de defensa ( Landau y paracaidista).
4) Estimulación de la locomoción: en esta estimulación se seguirán todos los pasos del desarrollo de la locomoción, desde el control nucal hasta la marcha, siempre enseñando al bebé las posiciones que debe adoptar para lograr una postura o una acción. Aunque al principio no entienda, explicarle sencilla y concretamente qué y para qué se hace. Se lo alentará constantemente y se lo premiará con mimos, caricias, etc. La estimulación será auditiva, (a través de sonidos con juguetes sonoros, la voz de la madre, etc) y táctil (con roces, caricias, etc.) y encaminada a desarrollar el control nucal, cambios de decúbito, sentado, gateo (cuadrupedia), bipedestación y marcha, "el deseo de caminar lo impondrá el niño". Subir y bajar escaleras. Caídas: es fundamental la educación de la caída, para que no se paralice ante una situación peligrosa. Realizar actividades de relajación. No cambiar de lugar los objetos peligrosos de la casa, sino enseñarle que se encuentran en ese lugar, utilizando todos los sentidos para localizarlos y tratar de evitarlos.
5) Esquema corporal: La imagen corporal es muy particular, muy subjetiva y en cada caso diferente, según haya sido la percepción de cuerpo de cada individuo y de acuerdo con su patología. La estimulación se hace para ayudar a formar su imagen corporal y la toma de conciencia de sí mismo. Se trabajará en el reconocimiento del cuerpo, relación parte -todo, actitudes que adopta el cuerpo en el espacio. Esto se logra con contactos y movimientos del cuerpo del niño, nombrando sus partes con el nombre real, explorando el cuerpo del otro, que servirá de modelo, para que pueda formar una imagen mental de otros cuerpos, diferente de la suya.
6) Expresión mímica y gestual: En los primeros días del nacimiento la cara carece de mímica, luego van apareciendo movimientos reflejos y más adelante movimientos voluntarios. Es la traducción del estado afectivo. El bebé ciego congénito la posee al principio porque estos movimientos son reflejos, luego al no tener un retorno con la mirada, la pierde; el ciego adquirido la tiene, pero la va perdiendo por falta de estímulo. Se enseñará utilizando la técnica del espejo, copiando las expresiones del rostro del otro. La finalidad es lograr la integración social, ya que las personas normovisuales las utilizan naturalmente para expresar sus estados de ánimo. Se estimulará también en los juegos de roles, cuentos, dramatizaciones, teatro.
7) Desarrollo del lenguaje: comprobar movimientos respiratorios en el otro, de la lengua y labios, siempre teniendo como modelo el cuerpo del otro. Contacto cuerpo a cuerpo, que toque la cara y el cuello para que sienta los movimientos de quien le habla. Emitir sonidos, sílabas, frases cortas (según la edad del bebé). Hablarle, hacerle preguntas, nombrar los objetos, que pida los objetos por su nombre, cuando entre o salga del lugar donde él está siempre diga "hola" o "adiós", háblele cuando se mueva cerca o lejos de él. Cuando el lenguaje se desarrolla sin experiencias sensoriales directas, aparecen el verbalismo (según Nolan) o puede ser síntoma de una inapropiada estimulación y experiencia (según Barry Hampshire).
ESTIMULACIÓN MULTISENSORIALÉsta debe considerar:
a) Desarrollo perceptual: cuanto mayor sea el número de experiencias sensoriales, aunque al principio sean indiscriminadas e inconscientes, mayor será el campo de interés que hará que el niño se mueva y se vuelva activo.
b) Estimulación táctil: no sólo será con las manos sino con todo el cuerpo, sintiendo texturas, temperaturas, pesos, tamaños y formas diferentes (tocar, manipular, manotear).
c) Estimulación de la prensión: llevar manos y objetos a la boca, primero con ayuda enseñando los esquemas de acción, poder "ver con sus manos". Golpear, frotar, agarrar, tirar, tomar, utilizar la pinza fina, etc. Todos estos movimientos deben tener un sentido. Sentir el calor y el olor de la comida, tomarla con las manos cuando es pequeño, luego aprenderá el uso de los cubiertos.
d) Estimulación Auditiva: diferenciar sonidos del propio cuerpo, sonidos cotidianos, sonidos de la naturaleza, de los animales, de los objetos, de los instrumentos musicales. También es importante el silencio como contraste.
e) Estimulación Olfatoria y Gustativa: sentir olores y sabores de diferentes sustancias que sean posibles de probar, chuparse las manos y dedos, chupar objetos y alimentos, olerlos. Saber discriminar las sustancias tóxicas o no comestibles.
f) Sentido kinestésico: sentido de posición y movimientos del cuerpo en el espacio sin incumbencia de la visión. Vivenciar el movimiento corporal, se ejercitará con juegos de imitación al principio.
ESCALAS PARA EVALUAR EL DESARROLLO MOTRIZ.Dentro de la edad pre- escolar , se observo una carencia de escala apropiadas, la mayoría de ellas fueron concebidas para determinar el desarrollo motor de individuos ciegos de más de 6 años .tales trabajos incluyen el test de imagen corporal de los niños ciegos , aunque no todos los test o pruebas que nombrare a continuación no motrices considero importante nombrarlas ya que de alguna manera también influyen en ella.
Los instrumentos más frecuentemente utilizados son los siguientes:
Area de Inteligencia y Desarrollo:
  • Escala Alexander.
  • Escala para medir el desarrollo psicomotor de la primera infancia de BRUNET-LEZINE.
  • WISC. Escala de Inteligencia de Weschler para niños
  • MSCA. Escala de Aptitudes y Psicomotricidad para niños.
Área pedagógica:
  • BADIMALE. Batería Diagnóstica de la Madurez Lectora.
  • IHE. Inventario de Hábitos de Estudios.
  • KUDER-C. Registro de Preferencia Vocacional.
  • Pruebas Pedagógicas Graduadas para Preescolar y Ciclo Inicial.
  • Pruebas de Estructura Rítmica de STAMBACK.
  • Pruebas Psicopedagógicas de Evaluación de Técnicas Instrumentales de CANALS.
  • TALE. Test de análisis de la lecto-escritura
  • Test de Conceptos Básicos de BOEHM.
  • INIZAN. Cuándo enseñar a leer.
  • Test ABC de FILHO.
  • ITPA. Test Illinois de Aptitudes Psicolingüísticas.
  • Área de Personalidad.
  • CEP. Cuestionario de Personalidad.
  • Cuestionario de Adaptación para Adolescentes y Adultos.
  • HSPQ. Cuestionario de Personalidad para Adolescentes.
  • TAMAI. Test Autoevaluativo Multifactorial de Evaluación Infantil.
  • IAC. Inventario de Adaptación de Conductas.
Área de aptitudes:
  • BAPAE. Batería de Aptitudes para el Aprendizaje Escolar.
  • CARAS. Percepción de diferencias.
A su vez, podemos señalar algunas pruebas específicas para ciegos, como son:
  • Test Williams o Test de Inteligencia para Niños Ciegos o con Defectos de Visión.
  • BLAT o Test de Aptitudes de Aprendizaje para ciegos.
  • Escala de Madurez Social para Niños Ciegos en edad Preescolar.
  • Escala de REYNELL ZINKIN o Escala de Desarrollo para Niños Pequeños Deficientes Visuales.
  • Escala de Desarrollo del Proyecto OREGON.
  • Test de evaluación del esquema corporal en los niños ciegos.
APOYO AL PROFESORADO.
Es ésta una de las tareas prioritarias para el Psicólogo: asistir técnicamente a los profesores itinerantes en relación a su desempeño de la función tutorial, que ha de dirigirse hacia las siguientes áreas de intervención al ser las que, fundamentalmente, se han de tener en cuenta en el trabajo con alumnos deficientes visuales graves:
  • Desarrollo madurativo del niño,
  • Incorporación a la Escuela Infantil,
  • Estimulación/entrenamiento visual,
  • Orientación y movilidad,
  • Habilidades de la vida diaria,
  • Técnicas instrumentales básicas braille/tinta,
  • Habilidades sociales,
  • Ocio, tiempo libre y deporte,
  • Nuevas tecnologías,
  • Orientación personal, escolar y vocacional,
  • Adaptaciones curriculares,
  • Asesoramiento/apoyo al profesorado de aula,
  • Asesoramiento al centro educativo,
  • Coordinación con otros profesionales y equipo,
  • Atención a familias.
Esto es posible a partir de reuniones periódicas con el profesorado, en las que se recaba información sobre las necesidades educativas derivadas de la práctica diaria con los Alumnos Deficientes Visuales Graves, y se transmite información de la Evaluación, tanto del Funcionamiento Visual como Psicopedagógica realizada a los alumnos. Estos contactos pretenden servir de ayuda y orientación sobre las áreas de intervención deficitaria y colaborar en la formalización de estrategias de trabajo.
La Escala del desarrollo Psicomotor de la Primera Infancia de Brunet- Lezine (de 0 a 5 años) se basa en cuatro categorías:
(P) Control postural y motricidad
(C) Coordinación oculomotriz y conducta adaptativa a los objetos
(L) Lenguaje
(S) Sociabilidad o relaciones sociales y personales
MOTRICIDAD EN LOS CIEGOS.
Para entrar en tema, el mayor porcentaje de personas ciegas es por causa de la diabetes, seguida por glaucoma, cataratas (congénitas o adquiridas), y en los bebés la retinopatía del prematuro (fibroplasia retrolental por excesiva concentración de O2).
Otras etiologías, no tan frecuentes, son: traumatismos, infecciones, (HIV, rubéola, sarampión), enfermedades hereditarias, malformaciones congénitas, síndromes como Marfan, Biedle Bardet, Down, Usher, ELA, etc. que determinan alteraciones en cualquier sector de las vías ópticas o en la corteza visual, produciendo ceguera pura; ceguera como secuela, o ceguera como signo de patologías sistémicas. Cuando llega una persona a una institución, a esta persona con su trastorno visual, se le deben realizar entrevistas de admisión con Psicólogo, Asistente Social, Gabinetista y Kinesiólogo, (profesionales que conforman el equipo psicotécnico).
En la admisión y con respecto a la Psicomotricidad, se evalúa a la persona, utilizando diversas pruebas para conformar un Perfil Psicomotriz, a partir del cual se comenzará la reeducación.
Dentro de este perfil psicomotriz encontramos varios ítems, a saber:
Esquema Corporal
Equilibrio
Coordinación Dinámica General
Orientación Espacial
Organización Temporal
Coordinación Dinámico- manual y Visomotora (para el disminuido visual)
Relajación
Tono y Postura
Respiración
Luego de esta evaluación, se elabora un plan de trabajo, basado en las posibilidades individuales, el diagnóstico y pronóstico del médico oftalmólogo o del especialista tratante y las expectativas de vida y ganas de rehabilitarse de cada persona. Siempre se tendrá en cuenta y se trabajar sobre las conductas afectiva, psicológica, psicomotriz y social.
En Psicomotricidad se trabaja desde el área corporal, pero hay que saber mirar lo que "el cuerpo expresa, lo que el cuerpo habla, lo que el cuerpo dice" lo que le pasa a nivel de las otras conductas, manifestándose de diferentes formas, la más evidente manifestación es la tónico- postural.
No es lo mismo la reeducación de un joven, quien tiene puestas sus esperanzas en seguir una carrera, en un puesto de trabajo o en formar una familia, que la reeducación de un anciano donde lo primordial para él, es pasar el tiempo entretenido en compañía de alguien.
La evolución del tratamiento dependerá de cada caso en particular, según su condición social y psicológica. Si convive con familiares, depende del "dejar hacer" de éstos, el tiempo de su rehabilitación; si vive solo la rehabilitación será más rápida por el instinto de supervivencia. Ya teniendo en cuenta estas variables únicas para cada persona, elaborado el plan de trabajo, se pasa al abordaje terapéutico que es un proceso de aprendizaje, un volver a empezar una nueva forma de vida.
Lo que se trabaja primero es el Esquema Corporal, base de toda la reeducación psicomotriz. En general, las personas con ceguera congénita o con disminución visual, poseen una imagen mental muy particular o distorsionada de su esquema corporal.
Así, el ciego congénito puede elaborarla solamente a partir de sensaciones táctiles, auditivas, kinestésicas y olfatorias y gustativas. El disminuido visual a partir de su resto visual, que está distorsionado según la patología que lo afecte (visión túnel, periférica, borrosa, escotómica, alteración para la visión de colores, diurna, nocturna, etc.) El ciego adquirido posee imagen mental de su cuerpo, pero se va desdibujando con el paso del tiempo.
La reeducación del Esquema Corporal entonces consistirá en:
adquisición o reafirmación de nociones del propio cuerpo, de sus segmentos, órganos internos y su función;
consistencia de las diferentes partes, temperatura, textura, movimientos que realizan cada una de las articulaciones;
integración de los segmentos en un todo: el cuerpo;
reconocimiento/ imitación de posiciones y actitudes corporales en sí mismo y en el otro;
gestualidad (fundamental en la relación social). Trabajamos con el propio cuerpo y el del otro, con sensopercepción, kinestesia y objetos como muñecos articulados o rompecabezas de figura humana para componer "el todo".
El equilibrio se pierde en el ciego adquirido y en el disminuido visual, porque se altera el trípode de sustentación que lo mantiene (visión, audición y propiocepción).
El ciego congénito ya tiene su SNC programado para mantenerse equilibrado y se estimula así desde el comienzo de sus desarrollo locomotor. Por lo tanto tendrán mayores dificultades en el equilibrio los ciegos adquiridos y los disminuidos visuales. La postura erecta en la persona con discapacidad visual, se caracteriza por tener los miembros inferiores en abducción y rotación externa para aumentar la base de sustentación, tronco en leve hiperextensión, cabeza con ligera hiperextensión e inclinación lateral colocando el oído de mejor audición levemente hacia el frente y arriba.
La reeducación del equilibrio comienza con :
- la concienciación de las sensaciones plantares; - la ejercitación del cuerpo en distintas posturas estáticas o en actitudes dinámicas; - toma de confianza y adaptación a la altura; - entrenamiento de las caídas.
La Coordinación Dinámica General implica lo que denominamos actividades motrices básicas (marcha, carrera, salto, arrojar y recibir, treparse, suspenderse, traccionar, empujar). La marcha todos la tienen, de una forma u otra, por la necesidad de desplazarse. Pero si observamos la marcha de las personas con déficit visual, encontramos una característica, se realiza con aumento de la base de sustentación y con arrastre de los pies, (para no perder el contacto con el suelo), con el cuerpo en extrema tensión, atento a lo que ocurre a su alrededor y con los miembros superiores hacia adelante para protegerse.
La reeducación se realiza con marchas en distintos apoyos y en diferentes planos. La reeducación de las demás actividades ya nombradas, se estimula para brindar confianza y seguridad en sí mismo; suprimir los miedos y ansiedades; disminuir sincinesias y contracturas producidas por la falta o la alteración visual, con un entrenamiento acorde y con los elementos que resulten necesarios.
La Orientación Espacial se trabaja desde: a) el espacio que ocupa el propio cuerpo y sus movimientos segmentarios; b) el espacio total, que es el espacio ocupado por el cuerpo en sus desplazamientos; y c) las relaciones espaciales dadas por el cuerpo, otros cuerpos y/u objetos que se encuentren en ese espacio.
Los objetivos de esta ejercitación son: 1) mejorar la movilidad dentro del espacio; 2) lograr la adquisición de confianza para lograr independencia y autovalimiento en la calle, espacios abiertos y lugares donde deba movilizarse por sí solo.
El ciego congénito tiene una noción muy particular del espacio, sus movimientos son limitados y cautelosos, se maneja con extrema hipokinesia, en la mayor parte de los casos fomentada por la familia "para que no se lastime o no rompa nada es preferible que permanezca sentado". Entonces tratamos de que se haga exactamente lo contrario, trabajamos estimulando a que los movimientos y desplazamientos sean amplios, muchas veces, utilizando música con distintos ritmos para estas actividades. Se trabaja la lateralidad, con el afianzamiento de nociones de derecha/ izquierda, fundamentales para la correcta orientación espacial y la lectoescritura Braille.
La Organización Temporal se trabaja para afianzar las nociones de tiempo, (antes- ahora- después; pasado- presente- futuro; distintos momentos del día). Esta ejercitación se realiza al principio con movimientos corporales, ir de lo concreto para luego pasar a la abstracción basada en narraciones de diferentes situaciones de los momentos del tiempo.
Los objetivos de la estimulación de la Coordinación Dinámica Manual y Visomotora son: a) reconocerse a sí mismo; b) relacionarse y conocer el mundo que lo rodea; y c) tener acceso a la cultura y a la educación. Para lo cual realizamos una ejercitación que logre: 1) independencia segmentaria de los miembros superiores; 2) educación de la prensión; 3) estimulación de la percepción táctil; y 4) ejercicios preparatorios al Braille.
La percepción táctil se estimulará especialmente con el ciego adquirido, ya que el congénito se maneja muy bien con el tacto, hablando de personas adultas. En los bebés forma parte de la Estimulación Temprana. La mayor dificultad la presentan los diabéticos, los que trabajaron con sustancias corrosivas o cáusticas y los que por su patología de base tienen disminuida la sensibilidad táctil. Para que el daño no se acelere en el diabético se debe enseñar a preservar las yemas de los dedos pulgar, índice y mayor al realizarse las pruebas del hemotest, a cuidarse de las quemaduras y heridas cortantes en esos dedos particularmente.
Hablando de Relajación, la misma se entrenará para disminuir el nivel de tensión que produce la realización de cualquier actividad en la persona con déficit visual. Además se dice que si la persona no está tensionada puede desarrollar más fácilmente el sentido radiestésico o sea el poder percibir los obstáculos que se encuentren frente a ella. Trabajamos con distintas técnicas de relajación, ya sean globales o segmentarias luego de cada sesión o para aquel que lo necesite en particular.
En cuanto a la Respiración, se utilizan ejercicios respiratorios para moderar el ritmo cardiorrespiratorio, entre y luego de efectuar cualquier tipo de actividad de la reeducación psicomotriz.
Todo esto parece un trabajo largo y tedioso, pero en la práctica es todo lo contrario pues no solamente se realizan ejercicios, sino además juegos con aplicaciones de lo que hemos trabajado esa sesión, a pesar de ser jóvenes, adultos o mayores. ¿A quién no le gusta jugar? Como culminación y síntesis del trabajo corporal hacemos muchas veces, esto que visto desde afuera parece banal o superficial, que es la dramatización o la aplicación a la danza.
Desde la mirada psicomotriz para poder realizarlas, debe existir:
1) Desde lo corporal:
un total dominio del cuerpo,
equilibrio en los desplazamientos,
manejo del espacio,
de la lateralidad,
nociones temporales,
economía de movimientos
relajación y la respiración correcta
emisión de voz y sonidos en la dramatización
coordinación
2) Desde lo cognitivo:
nivel de pensamiento
aprendizaje
evocación
3) Desde lo social:
socialización
integración
solidaridad
4) Desde lo afectivo: - sentimientos y emociones - sensación de bienestar por realizar una actividad física - sentirse valorizado - alegría de vivir por haber podido realizarse como persona
Los niños con disminución visual deberán ser estimulados a mirar, para aprender a utilizar la coordinación visomotora, obtener imágenes un poco más claras, reforzar la coordinación motriz y facilitar el desarrollo de conceptos.
En el niño con pérdida progresiva de la visión, en los primeros años sus esquemas de movimiento se desarrollan en forma normal, tendrán una imagen mental y espacial y los esquemas motrices internalizados aunque no puedan ver. El primer objetivo será concentrar su atención en los recuerdos visuales que conserven, en relación al espacio; a medida que se adapten a la utilización de la coordinación audiomotora y no visomotora, para la orientación espacial y los movimientos.

BIBLIOGRAFIA
El desarrollo psicológico de los niños ciegos en la primera infancia; Miguel Pérez Pereira; Josefa Castro; Ediciones PAIDOS Barcelona, Buenos Aires; 1ª edición 1994.
Discapacidad visual V; Marta Sarria; Región latinoamericana; N 55; 1987.
Educación de alumnos con deficiencias visuales en una escuela ordinaria; J. Kirk Horton; Director de país , Helen Keller internacional; UNESCO 1988.
Apuntes de Internet.

PSICOLOGÍA DE LA CEGUERA.


Iván Tapia Contardo
Especialista en Educación de Ciegos (U.Ch.)
Objetivos del artítulo:
Comprender cada etapa por las que debe pasar la persona que queda ciega, para orientar mejor su rehabilitación.
Conocer exacta y objetivamente cuales son las limitaciones y capacidades de las personas ciegas.
Conocer de que forma la persona ciega suple su deficiencia visual.
Comprender la importancia de que la persona ciega y sus familiares acepten la ceguera.

Piense usted que va por la vida feliz con unos propósitos, proyectos laborales, sentimentales, familiares, etc. y de pronto todo aquello se ve truncado por la ceguera. Tal vez ya no podrá desarrollar esa profesión en que la vista es imprescindible, las relaciones con los demás cambiarán bruscamente del respeto hacia su persona a la lástima, la conmiseración; dependerá de otros para movilizarse, tendrá que olvidar muchas cosas aprendidas y, sobre todo, olvidarse de la vista y las imágenes para comenzar a funcionar en un mundo de sonidos, texturas, olores, sabores y la ausencia de toda información visual, tales como carteles, anuncios, TV, cine, revistas, periódicos, libros, señales de tránsito, semáforos, etc.

ETAPAS EN LA REHABILITACIÓN PSICOLÓGICA DEL CIEGO
Para cualquier individuo, perder la vista o que nazca alguien ciego en la familia, es un hecho muy impactante y traumático. De hecho se habla en Psicología de la Ceguera que hay tres etapas en la rehabilitación psicológica de un ciego -y esto también en parte es válido para su familia-, por las que habrá de pasar inevitablemente: un primer estado de schock, luego un período de profunda depresión, para llegar por último a la aceptación de su déficit.
El estado de schock es una especie de adormecimiento psíquico. La persona atina a nada, no llora ni ríe, cae en el mutismo pues le ha impresionado tanto esta pérdida de sus ojos que no sabe como reaccionar, hasta que toma conciencia en pocas semanas de su nueva condición. Se sumerge en un estado depresivo tal que sólo quiere morir. Muchas veces en esta etapa intentan suicidarse, reaccionan con violencia, quieren estar solos. Quienes les rodean en esos instantes deben tener mucha comprensión y darse cuenta que las palabras de consuelo poco podrán hacer por ella, pero sí es muy importante que sienta la amorosa compañía de otros junto a ella.
En verdad llora la pérdida de su vista y de toda una vida funcionando de acuerdo a ciertos esquemas. Pensemos que tendrá que aceptar su nueva condición de ciego para poder iniciar cualquier aprendizaje rehabilitativo.
El proceso de aceptación de la ceguera por parte del ciego es como un nuevo nacimiento. Mientras la persona no comprenda que la persona con vista o normovisual que era ya ha muerto, no podrá manifestarse la nueva persona, ciega pero con grandes capacidades de readaptación. Aplicando este principio a la rehabilitación de las personas ciegas, podemos decir que en tanto el ciego no renuncie psicológicamente a su antigua vida de persona con vista, no podrá resucitar como persona ciega rehabilitada. El aprendizaje del sistema Braille, el uso del bastón, el método de cálculo mediante Sorobá y todas las técnicas que le permitirán desenvolverse normalmente en el medio, pasa por esta toma de conciencia de su nueva vida y la aceptación de esa condición.

LAS VERDADERAS LIMITACIONES DEL CIEGO.
Existe la tendencia a exagerar los impedimentos de las personas con discapacidad, sobre todo en el caso de los ciegos. Sin embargo, al observar detenidamente su condición, llegamos a la conclusión que las limitaciones se reducen sólo a tres aspectos. Han de saber ustedes que tres son las mayores limitaciones que trae consigo la ceguera; a saber: desplazamiento, control del ambiente y adquisición de cultura.

Dificultades en el desplazamiento. Basta que usted cierre sus ojos y trate de caminar "a ciegas" hasta la puerta de su hogar, para darse cuenta de lo difícil que es para alguien movilizarse prescindiendo del sentido de la visión. Sin embargo la persona ciega, con un buen entrenamiento en Orientación y Movilidad con bastón (o perro guía, en los países del primer mundo) puede lograr una movilidad independiente.
Limitaciones en el control del ambiente. El sentido de la vista tiene la capacidad de abarcar grandes espacios y captar una gran cantidad de información en forma simultánea. Por ejemplo si usted entra en un lugar desconocido se percata de inmediato de la dimensión de ese espacio, color, cantidad de personas, como van vestidos, de que sexo y estrato social son, en fin, unos datos que será muy difícil percibir con los ojos cerrados. La inseguridad que siente el ciego o ciega por ese desconocimiento derivado de la carencia de la vista, constituye un grave problema, que puede ser resuelto con una adecuada Educación Especial (en el caso del niño) y Rehabilitación (en el caso del adulto). Ellos son entrenados en la utilización de los "sentidos vicariantes" (oído, tacto, olfato, gusto y sentido de percepción de obstáculos) y en las Actividades de la Vida Diaria para su manejo personal y social.

Adquisición de Cultura. Gran parte de la información cultural de nuestra sociedad es visual: libros, revistas y periódicos son escritos en tinta; el cine y la televisión son eminentemente visuales; las señales en las calles, la publicidad, los escaparates, etc. están diseñados para personas que ven, esto es los normovisuales. Actualmente recibimos a través de Internet todos los contenidos culturales de una sociedad de información. ¿Qué hace la persona ciega para integrarse a este mundo informativo? Aquí es donde el Sistema Braille ocupa un lugar importante en la superación de esta tercera limitación.

LA CUARTA LIMITACIÓN
Hay lo que hemos llamado "la cuarta limitación" y que es la que más les afecta a las personas ciegas. Me refiero a la segregación, producto de nuestra ignorancia, rechazo y falta de solidaridad. No hay otra limitación que sea inherente a la ceguera, salvo aquellas que los normovisuales, por prejuicios, ignorancia y falta de amor, queramos atribuirle a las personas ciegas. Ellos son seres humanos con los mismos derechos a desarrollarse integralmente (en cuerpo, mente y espíritu), que han recibido de Dios unos talentos o capacidades que les hacen especiales.
Existe lo que se llama la "compensación"; cuando alguien pierde un órgano sensorial tan importante como la vista, su cerebro reorganiza la información que viene del medio a través de los otros sentidos (tacto, audición, olfato, etc.) y forma dentro de sí una interpretación de la realidad, tan buena como la de una persona que ve. Los ciegos pueden aprender, estudiar una profesión y ejercerla, formar una familia, ser independientes, amar y servir a su prójimo. Nada impide su desarrollo, con una adecuada Educación y Rehabilitación. En este sentido el aprendizaje del Sistema Braille es imprescindible.
LAS SUPLENCIAS SENSORIALES
Los sentidos del hombre son de capital importancia para el conocimiento de su mundo exterior. Cada una de los cinco sentidos tradicionales ofrece unas informaciones características del entorno que rodea al organismo humano, pero su valor como estímulo perceptivo es diferente. La vista, el sentido más utilizado para obtener información externa (80% de los estímulos totales recibidos por un vidente), puede ser compensada por los otros sentidos; por ello, el aprovechamiento sensorial depende también del tipo de persona que reciba los estímulos.
La información sensorial no visual (que en realidad en muchas ocasiones el normovisual no aprovecha porque no le indica apenas nada en comparación con los datos apartados por la vista), para el ciego puede ser vital.
Los estímulos sensoriales que percibe el invidente por los cuatro sentidos restantes son para él mucho más significativos, y sabe organizarlos de forma más adecuada para orientar su conducta. La diferencia es fundamentalmente cualitativa, pues estriba en que necesita aprovechar mejor la información sensorial no visual, utilizando de distinto modo los elementos sensoriales que posee.
Revisando las hipótesis explicativas sobre las suplencias sensoriales del ciego, se comprueba que se han dado tres fundamentalmente:
  • El ciego posee más agudeza sensorial de la normal en los sentidos que le restan.
  • El ciego tiene más dotes intelectuales que los videntes.
  • El ciego organiza mejor los estímulos y hace un uso más adecuado de los datos aportados por los sentidos.
Primera hipótesis: Al ciego se le desarrollan los otros sentidos.Una concepción mecanicista atribuye la suplencia sensorial del ciego a la hipertrofia de los restantes sentidos. El tacto, el oído, el olfato y el gusto serían más sensibles, más precisos y eficaces que en el normovisual. Esta hipótesis ha llevado a realizar numerosos experimentos de laboratorio, comparando el rendimiento sensorial de ambos. Los resultados han sido completamente contradictorios, pues en unos casos las puntuaciones favorecían a los ciegos, mientras que en otras los beneficiados eran los normales, por lo que no se puede concluir que los ciegos tengan más agudeza sensorial.
Si en su conducta normal el ciego parece tener más agudeza que el que ve, es debido a que necesita aprovechar más los estímulos sensoriales que posee. Utilizando cada uno organiza mejor su atención por un principio de adaptación sicológica y social.
Segunda hipótesis: El ciego es más inteligente.Otra hipótesis supone que el ciego hace mejor uso de sus sentidos por una superioridad intelectual sobre el normovisual. Pierre Villey, influido por la mentalidad de su época, afirmaba en 1927, que "toda suplencia proviene de la inteligencia".
Ciertos estudios sicométricos reflejan que los ciegos no consiguen mejores resultados en los tests de inteligencia. Incluso como grupo obtienen medidas intelectuales algo inferiores estadísticamente a las de los de vista normal. También se verifica un mayor porcentaje de debilidad mental (10% frente a un 2% en normovisuales), debido a que algunas causas productoras de este trastorno lo son simultáneamente de la ceguera (meningitis, rubéola, traumas de nacimiento, etc.).
Otras investigaciones llevadas a cabo con niños ciegos demuestran que éstos sufren por término medio, respecto a los que ven, un retraso de más de un año en la adquisición de nociones intelectuales. También la memoria ha sido frecuentemente esgrimida como factor de suplencia sensorial, puesto que los ciegos aparentan generalmente una extraordinaria memoria en su vida cotidiana. Pero si acudimos a la experimentación, varios estudios sicométricos demuestran que la memoria "pura" del ciego (repetición de listas de palabras, de números, retención de datos de historias, etc.) no es superior a la de los de vista sana. Estos resultados no tienen por qué extrañar, puesto que la memoria actúa selectivamente en función del interés del individuo por concentrarse sobre unos datos y rechazar otros.
Tercera hipótesis: El ciego organiza mejor los estímulosLos sentidos del ciego son, iguales a los del que ve en agudeza y características generales. Por otro lado, el ciego no tiene ni más inteligencia ni más memoria que los normovisuales.
En la vida real no se actúa con un solo sentido, sino que hay una cooperación entre varios. Al ciego no se le puede medir según un esquema mecánico simplificado, como algunos han hecho. El ciego no sería como el motor de un coche de cinco cilindros que funciona con sólo cuatro, más bien los otros cuatro sentidos del ciego se reestructuran con esquema propio, organizándose de un modo distinto al del normovisual.
La necesidad obliga al invidente a sacar más partido de aquellos sentidos que la persona con visión apenas utiliza, haciendo así que la información obtenida con ellos sea más precisa. La suplencia sensorial no estaría, pues, basada en dones misteriosos, sino en una conducta que el ciego organiza de manera cualitativamente distinta a la del normovisual.
En resumen, nuestra capacidad de percepción se adapta al medio ambiente y aprendemos a percibir de uno u otro modo, según los sentidos que pongamos en juego y la forma en que lo hagamos. La persona ciega suple su deficiencia organizando de un modo diferente los estímulos que recibe; no posee más agudeza sensorial en los sentidos restantes ni tiene más dotes intelectuales que los que ven.
APRENDIENDO A ACEPTAR LA CEGUERA
Cada persona reacciona ante la ceguera conforme a su personalidad y carácter. Una persona que en el pasado tenía necesidad de depender de otros, un hombre que se mostraba poco responsable, incapaz de llevar una existencia autónoma, al quedar ciego acentuará todavía más estos síntomas. El individuo que poseía una gran madurez e independencia antes de quedar ciego, probablemente afrontará con mayor equilibrio la ceguera.
Cada persona posee una opinión preconcebida sobre la ceguera. Los estereotipos habituales son:
el ciego mendigo, dependiente de los demás que vive de la caridad pública
el ciego "genial", que puede superar todo tipo de obstáculos por sí mismo
el ciego con poderes sobrenaturales, mágicos, que hace cosas que nadie sería capaz de hacer por vía natural.
El que ve casi siempre cree que su posición social no sería la misma en el caso de que estuviera ciego, sino que sería un objeto de lástima y caridad.
El adulto que se queda sin vista tiene que enfrentarse con la tarea de reorganizar su mundo interior, por el hecho de que es una persona diferente. Sus intereses, sus capacidades, su posición social, sus aspiraciones e incluso su figura corporal, su aspecto externo, se han cambiado o modificado profundamente.
Ante todo es preciso decir que mientras esa persona no acepte interiormente que es distinta, que es una persona ciega, no es posible obtener un ajustamiento, una completa rehabilitación.
Esto que parece tan simple, es realmente uno de los pasos más importantes del proceso de rehabilitación.

CUESTIONARIO.
¿Cuáles son las principales limitaciones o problemas que tienen las personas ciegas?
¿De qué manera los ciegos superan sus dificultades en el desplazamiento?
¿Por qué se dice que la vista es un sentido abarcador?
¿Cuáles son los "sentidos vicariantes" y por qué debe entrenarlos la persona ciega?
¿Qué actividades de la vida diaria cree usted que debe realizar el ciego?
Investigue en qué consiste el Sistema Braille.
¿Cómo llama la presente lección a la persona que no ve? ¿y cómo nombra al que ve?

SUGERENCIAS PARA LA CLASE
Observar imágenes de personas ciegas en diversas actividades.
Escuchar, analizar y discutir sobre los contenidos de una entrevista grabada a un profesional ciego.
Discernir las diferentes etapas en la rehabilitación psicológica del ciego.
Estudiar las distintas formas de enfrentar el problema de acuerdo al tipo de ceguera.
Analizar las actitudes de los normovisuales frente a los ciegos


EL SISTEMA BRAILLE Y SU ENSEÑANZA


Hoy en día, las personas ciegas del mundo pueden leer y escribir gracias a lo que logró Louis Braille, quien ideó en 1824 el sistema que llegó a ser conocido por su nombre. El Braille es un sistema de puntos en relieve que permite a los ciegos leer y escribir al tacto. Todo el sistema deriva de una distribución de seis puntos que, al ser arreglados en diferentes posiciones y combinaciones, forman los distintos signos o caracteres braille; como se aprecia en la ilustración.
OO
OO
OO

Para la identificación y dictado de los signos, se asocia a cada punto un número, como se observa en el dibujo.
1 4
2 5
3 6

Así, por ejemplo, la letra "f" está formada por los puntos 1, 2 y 4; siendo su configuración:
O O
O

Cuando Louis Braille ingresó al Instituto Nacional para Jóvenes Ciegos de París el año 1819, existía allí catorce libros en caracteres en relieve (romanos), los que rara vez se usaban porque los ciegos los encontraban muy difíciles de leer.
En 1824, cuando Braille introdujo la primera versión de su sistema a la escuela de París, se enfrentó a una oposición decidida de los profesores normovisuales que sostenían que sería absurdo enseñar a los ciegos un alfabeto cuyas configuraciones eran tan distintas de aquellas del alfabeto corriente en relieve. Sin embargo los alumnos adoptaron de inmediato el sistema.
La mayoría de los lectores de braille leen principalmente con una mano, ya sea la derecha o la izquierda. Lo más frecuente es que se lea con el dedo índice, pero hay personas que también emplean el dedo medio y el anular. La velocidad de lectura promedio se ha estimado en unas 104 palabras por minuto.
Existen varios grados distintos de braille: el que implantó Louis Braille es lo que hoy conocemos como el grado 1, un sistema de 200 contracciones y palabras escritas en forma abreviada o grado 2 y el braille grado 3, que es una prolongación del anterior por medio del empleo de nuevas contracciones y palabras abreviadas, y ahorrando vocablos por medio de la eliminación de vocales.
El braille se escribe utilizando un instrumento de repujado llamado regleta, que consiste fundamentalmente de dos planchas metálicas o de plástico (la guía) engoznadas entre sí en tal forma que entre ambas puede insertarse una hoja de papel. La plancha superior tiene perforaciones en forma de ventanillas, llamadas cajetines. La escritura en relieve de los puntos resulta al presionar un punzón sobre el papel para formar cada signo braille, punto por punto, de derecha a izquierda, pues se escribe en sentido contrario a su lectura.
El joven inventor Luis Braille, con gran espíritu de superación y valentía, enfrentó el desafío de crear un sistema que sacara a las personas ciegas de la oscuridad cultural. Su fe y trabajo perseverante lograron transformar la desgracia en un hecho afortunado, a tal punto que el instrumento que provocó su ceguera viniese a ser el punzón que abriera los ojos interiores de todos los ciegos del mundo. En 1824, a los 15 años de edad, Louis Braille terminó de desarrollar su sistema de matrices de seis puntos. Braille se desempeñó, además de estudiante, como inventor, investigador, escritor, profesor y músico organista.
Valentín Haüy fue un gran educador de ciegos, fundador del Instituto Real Para Jóvenes Ciegos de París y uno de los primeros creadores de un programa para ayudar a leer a los ciegos. El quería combatir la idea generalizada de que la ceguera impedía la escolarización del invidente. Los primeros experimentos de Haüy consistieron en imprimir letras grandes en relieve sobre un papel grueso. La importancia de este educador está, además de haber fundado varios centros de estudio para personas ciegas en distintos lugares del mundo, el haber creado un método que, aunque un tanto rudimentario, sentó las bases para el sistema que llegaría a prevalecer. Braille aprendió a leer libros con letras en relieve de la reducida biblioteca de Haüy.

La escritura nocturna, que posteriormente recibió el nombre de sonografía, se ideó para el campo de batalla. Era un sistema de comunicación táctil que se valía de puntos en relieve dispuestos en un rectángulo de seis puntos de altura y dos de anchura. Este código representaba fonéticamente las palabras.
El Sistema Braille es un código de lectura y escritura táctil, consistente en signos formados por las distintas combinaciones, en posición y cantidad, de seis puntos en relieve, factibles de ser leídos con las yemas de los dedos.

ENSEÑANZA DEL BRAILLE EN TRES ETAPAS.
El aprendizaje del Braille es un proceso que debemos hacer lo más sencillo posible a nuestro alumno ciego, sea niño, joven o adulto. Un error grave sería entregarle en nuestra primera clase un libro o revista en Braille, pues esto provocará en la persona temor y rechazo, al tratar de identificar los puntos con sus dedos.
Es preciso, antes de enfrentar el texto impreso en relieve, que el ciego desarrolle su habilidad táctil y motriz, sobre diversos planos. A continuación describiremos cada una de las etapas de la enseñanza del Sistema Braille, para su conocimiento. Ninguna de ellas debe omitirse por tedioso que nos resulte. Justamente aquí estriba la creatividad y paciencia que debe tener un samaritano para transmitir seguridad y destreza en el aprendizaje del Braille.


OBJETIVOS INSTRUMENTALES ESPECÍFICOS.

1) Al término del programa el alumno será capaz de leer al tacto, palabras y oraciones simples en Sistema Braille integral, a renglón separado; identificando letras, signos de puntuación y signos auxiliares.
2) Al término del programa el alumno será capaz de escribir en regleta palabras y oraciones simples en Sistema Braille integral.

I ETAPA: APRESTO.
Apresto significa preparación. He aquí algunos ejercicios para desarrollar su habilidad tactil:
- Muestre a la persona ciega todo tipo de objetos caseros, para su reconocimiento (cuchara, plato, peineta, lápiz, libro, radio, canasto, etc.)
- Haga que identifique los distintos materiales de las cosas (madera, metal, género, papel, plástico, etc.)
- Entréguele una gran cantidad de géneros para su identificación (trevira, seda, percala, paño lenci, lino, etc.)
- Pídale que ordene los géneros o telas por textura (del más suave al más aspero) y por grosor (del más delgado al más grueso)
- El mismo procedimiento puede realizarlo con papeles y maderas
- Identificar representaciones (pequeñas esculturas, maquetas de casas y barcos, reproducciones de animales, etc.)
Es aconsejable que no se salte ninguno de estos ejercicios y los realice en el mismo orden en que se exponen. Las clases pueden ser amenizadas con audición de música, conversación y discusión de temas relativos a la ceguera y la Rehabilitación, como también ejercicios para agudizar los otros sentidos (olfato, gusto, audición).


II ETAPA: PRELECTURA.
Los objetivos de la Prelectura son:
1) Que la persona ciega pueda internalizar el signo generador y la numeración de los puntos, y memorizar las letras del alfabeto Braille, con diversas ayudas nemotécnicas, como su ordenamiento en series.
2) Que la persona ciega identifique y discrimine tactilmente distintas agrupaciones de puntos Braille.

Para el cumplimiento de esta etapa es preciso contar con los siguientes materiales didácticos que se describen a continuación, además de los que usted pueda crear para cumplir los objetivos propuestos.
Naipe Braille: Cartones de 10 cm. de alto por 7 cm. de ancho, que representan las letras del alfabeto en relieve, mediante círculos de goma, plástico, cartón, botones u otro material táctil; con la correspondiente representación en tinta macrotipo, de preferencia en relieve, en el reverso de cada cartón. El borde inferior del naipe debe estar dentado o con alguna marca que sirva de orientación tactil al lector.
Cajetines Braille: Piezas rectangulares de madera de 10 cm. de alto por 7 cm. de ancho, con 6 orificios de 1,5 cm. de diámetro, en los cuales se pueden introducir tarugos, bolitas o canicas u otro material, a modo de puntos Braille.
Cuadernillo de Rieles Braille: líneas de signos Braille en tamaño normal, en complejidad creciente (puntos separados a puntos sin separación; menor cantidad de puntos a mayor cantidad; signos de menor dificultad tactil a signos de mediana y mayor dificultad tactil; signos con gran diferencia de configuración a signos con muy leves diferencias de configuración); en las que el alumno puede identificar cantidad de puntos, cantidad de pares, cantidad de signos, el signo diferente, el o los signos iguales, el signo en espejo, etc.

EJERCICIOS DE PRE-LECTURA.
Para el ejercicio de la Pre-Lectura proponemos las siguientes actividades:
1) Con el Naipe braille
Pida a la persona ciega que:
- Tome los naipes, siga sus bordes e identifique el extremo inferior dentado.
- Nombre los puntos (1, 2, 3, 4, 5 y/o 6) de cada naipe que usted le entregue.
- Toque los naipes que representan las letras vocales y memorice sus puntos.
- Toque los naipes que representan las 10 primeras letras del alfabeto (a, b, c, d, e, f, g, h, i, j).
- Observe las particularidades de esta primera serie de letras (utilizan sólo los puntos superiores: 1,2,4 y 5; todas comienzan con el punto 1, excepto la i y la j; etc.)
- Forme palabras con las letras aprendidas.
- Lea las palabras que usted le entregue.
- Haga lo mismo con las letras restantes.
- Descubra la clave para la formación de la segunda y tercera serie de letras (segunda serie se forma agregando el punto 3 a cada una de las letras de la primera serie; tercera serie se forma agregando el punto 6 a cada una de las letras de la segunda serie)
- Invente claves nemotécnicas personales para memorizar las letras del alfabeto Braille

2) Con los Cajetines Braille (Paralelo al trabajo con Naipe Braille, con el fin de hacer la clase más variada y entretenida.)
Pida a la persona ciega que:
- Toque el cajetín braille con toda su mano, poniendo la palma encima.
- Toque el borde del cajetín braille con sus dedos, siguiendo todo el contorno.
- Reconozca que tiene forma rectangular.
- Lo ubique sobre la mesa con el borde menor hacia abajo.
- Escriba diversos grupos de puntos que usted le dictará.
- Haga los mismos ejercicios realizados con el Naipe Braille.
- Escriba palabras al dictado.
- Lea palabras escritas por usted.
- Aprenda letras acentuadas, signo mayúscula, signo número y signos de puntuación.
- Lea los puntos que faltan en cada letra del alfabeto y descubra nuevas claves.
- Identifique letras "en espejo" (d/f; h/j; e/i; q/ñ; r/w; t/ü; u/ó; z/é)
- Escriba y lea su nombre.

3) Con el cuadernillo de Rieles Braille (Se puede continuar utilizando el juego de Cajetines Braille con el fin de hacer la clase más entretenida.)
Pida a la persona ciega que:
- Toque completamente el cuadernillo.
- Cuente las líneas o rienes de puntos que hay en la página
- Identifique la línea más larga y la más corta.
- Cuente puntos en un riel con separación mayor.
- Cuente puntos en un riel con separación menor.
- Identifique el signo diferente (1,2,3) en una línea de puntos 1.
- Identifique el signo diferente (1) en una línea de puntos 1,2,3.
- Identifique el signo diferente (1,2) en una línea de puntos 1,2,3.
- Identifique el signo diferente (1,2,3) en una línea de puntos 1,2.
- Identifique el signo diferente (1,4) en una línea de puntos 1,2,3.
- Identifique el signo diferente (1,4) en una línea de puntos 1,2.
- Identifique dos o tres signos diferentes en una línea de signos.
- Haga ejercicios similares con signos 1,3,4 - 1,2,3,4 - 1,2,3,6 - 1,3,6 - 1,2,4,5 - 1,3 - 1,3,4,6
- Busque signo dado al inicio de la línea, en grupo de signos en lado derecho de la hoja
- Identifique las letras vocales en riel de signos.
- Identifique en riel de signos las letras consonantes l, b, c, m, p, v, x, g, k.
- Lea sencillas palabras con letras separadas por un espacio de un cajetín (ejemplo: lala, bala, beca, alcoba, abuela, malo, pala, alpaca, ola, etc.)
- Lea las mismas palabras sin separación entre letra y letra.
Para la confección del Cuadernillo Braille y para futuras lecciones, usted requerirá disponer de una regleta y un punzón.

III ETAPA: LECTURA.
Los objetivos de la lectura son:
1) Que el alumno discapacitado visual sea capaz de leer al tacto, palabras y oraciones simples en Sistema Braille integral, a renglón separado; identificando letras, signos de puntuación y signos auxiliares.
2) Que el alumno discapacitado visual identifique y discrimine tactilmente las letras de menor, mediana y mayor dificultad táctil, en oraciones simples.

ACTIVIDADES DE LA LECTURA:
Sugerimos que el alumno:
- Identifique al tacto las letras vocales.
- Identifique al tacto las letras de menor dificultad táctil: l, b, c, p, m, v, x, ll, k.
- Lea palabras sencillas con la combinación de vocales y cada una de estas letras, separadas por el espacio de un cajetín.
- Lea palabras sencillas y oraciones simples con la combinación de vocales y cada una de estas letras, sin separación entre letra y letra.
- Identifique al tacto las letras de mediana dificultad táctil: d, f, h, j.
- Lea palabras sencillas con la combinación de vocales y cada una de estas letras, separadas por el espacio de un cajetín.
- Lea palabras sencillas y oraciones simples con la combinación de vocales y cada una de estas letras, sin separación entre letra y letra.
- Identifique al tacto las letras de mayor dificultad táctil: t, s, n, w, y, z, ñ, q, r.
- Lea palabras sencillas con la combinación de vocales y cada una de estas letras, separadas por el espacio de un cajetín.
- Lea palabras sencillas y oraciones simples con la combinación de vocales y cada una de estas letras, sin separación entre letra y letra.

PARA REFLEXIONAR

  • Comente con otras personas la siguiente afirmación y luego haga una reflexión escrita: El punzón que produjo la ceguera de Louis Braille fue el instrumento que le permitió escribir su sistema de lectura y escritura.
  • ¿Quién fue Valentín Haüy y qué importancia tiene en la historia de la Educación de Ciegos?
  • Piense usted de qué forma aprende una persona ciega las Ciencias Naturales, la Historia y Geografía, las Matemáticas y las Artes.
  • ¿Qué importancia tiene para un escolar ciego el sistema creado por Louis Braille?
  • ¿En que consistió la sonografía de Charles Barbier?
  • Escriba su propia definición del sistema Braille.
  • ¿A qué edad y en que año Louis Braille terminó de desarrollar su sistema de matrices de seis puntos?
  • Nombre las distintas actividades que desempeñó Braille a través de su breve vida.
  • ¿Cuál es la razón del éxito del sistema Braille por sobre otros métodos de lectura para ciegos?
  • ¿Qué limitación propia de la ceguera puede superar la persona ciega mediante el aprendizaje de la lectura y escritura Braille?
  • Confeccione un "punzón", similar al usado por los talabarteros pero con punta roma, sin filo.
  • Marque puntos con su punzón en una hoja de cartulina puesta sobre una superficie blanda, de preferencia goma caucho.
  • Trate de escribir una letra en Braille y luego táctela con los ojos cerrados.

    BIBLIOGRAFÍA.
    "El Sistema Braille", American Foundation for the Blind, AFOB.














INTEGRACION DE NIÑOS CIEGOS EN LA ESCUELA COMUN

Iván Tapia Contardo
Especialista en Educación de Ciegos (U.Ch.)
 
Abstract: Se describe el funcionamiento y experiencia de un Centro de Integración de Ciegos, sus objetivos, organización técnica y planes de atención. Explica las distintas etapas del Proceso de Integración Educacional en sus dos períodos: Transición e Integración. Destaca la labor del Profesor Itinerante, quien asesora a los maestros y observa el desarrollo del alumno integrado. Hace una clasificación de los distintos usuarios de este tipo de educación y los procedimientos pedagógicos utilizados con cada uno. Plantea los pre-requisitos para la integración de un escolar ciego, los pasos que se dan al incorporarlo al aula común, las dificultades a las que se enfrenta y cómo se superan. Finalmente señala los resultados obtenidos.
Por décadas se pensó que el ciego necesitaba ser protegido, ya que la deficiencia visual lo incapacitaría casi por completo para participar normalmente de las relaciones sociales con el grupo de normovisuales. A través de la historia se pueden reconocer tres épocas referidas a la forma en que la sociedad ha tratado a las personas ciegas. Se les ha considerado sucesivamente como cargas sociales, como sujetos necesitados de protección y hoy como miembros integrados a ella.

En siglos pasados los objetivos y las acciones educativas, eminentemente de segregación, de la Educación de Ciegos no estaban en pugna, sino, por el contrario, se avenían: los ciegos eran "educados en su mundo para su propio mundo". Mas cuando éstos comenzaron a invadir campos profesionales de normovisuales, los educadores se vieron en la necesidad de revisar el clásico objetivo de la Educación de Ciegos.

Actualmente nadie niega el principio de que "el discapacitado visual pertenece a la sociedad de normovisuales" y que, por lo tanto, es para ese ambiente que debe ser educado. Este es el principio fundamental que sostiene y da vida a la Educación Integrada.

En Chile, educadores y autoridades hicieron suyo este desafío y es así como desde 1976 se está llevando a cabo la experiencia de educar en forma integrada a escolares ciegos junto con normovisuales, lo cual ha entregado interesantes resultados.

El presente artículo es una descripción de cómo concebimos el proceso de integración educacional, cómo lo llevamos a efecto y el papel que juegan el Profesor Itinerante, la Biblioteca y los diversos departamentos de un Centro de Integración.
OBJETIVOS DEL CENTRO DE INTEGRACIÓN
La Educación Integrada del Ciego consiste en educar a los niños y jóvenes ciegos junto con los normovisuales, en escuelas comunes. Para esto la persona ciega requiere previamente de una capacitación sicológica, motriz y pedagógica.


Nuestra hipótesis es que la Educación Integrada brinda más posibilidades de desarrollo sicosocial que la segregada, de un carácter más proteccionista. La meta de este tipo de educación es la integración social y laboral del ciego, de modo que éste sea un individuo capaz de participar e interrelacionarse en forma normal con normovisuales y de competir en productividad y eficiencia con ellos.

Teniendo por delante esta meta, nos hemos propuesto en el Centro de Integración tres objetivos primordiales, que apuntan al niño, la familia y la comunidad. Estos son:
1. Propender hacia la atención integral del discapacitado visual, entendiendo ésta como aquel proceso de formación bio-sico-social cuyo propósito es la integración progresiva a su medio familiar, escolar, social y laboral.
2. Crear conciencia en la familia de los discapacitados visuales de su responsabilidad y compromiso con el proceso de integración social de sus miembros deficitarios.
3. Crear conciencia en la comunidad de la necesidad de incorporar a los discapacitados visuales en sus esquemas de funcionamiento interno.
ORGANIZACIÓN TÉCNICA DEL CENTRO
Las acciones del Centro de Integración se realizan a varios niveles: con el niño en el aula, en el propio Centro, con la familia, las Escuelas comunes y comunidad en general.


Estas acciones se organizan en cuatro Planes fundamentales:
A. Plan de Atención Integral al Alumno, que apunta hacia el desarrollo de las áreas sicomotriz, cognitiva, emocional-social y manual-artística, a través de los programas de Diagnóstico, Tratamiento e Itinerancia.
B. Plan de Biblioteca, Documentos de Apoyo, Asesoría Técnica al personal del Centro, mediante programas de Perfeccionamiento y Supervisión
C. Plan de Capacitación de Samaritanos.
D. Plan de Difusión y Extensión de los servicios.
ETAPAS DEL PROCESO DE INTEGRACIÓN EDUCACIONAL
El tratamiento se entrega fundamentalmente en dos etapas: Transición e Integración. El período de Transición, que es el paso entre la vida de hogar y su posterior incorporación a la escuela común, se subdivide en Instrumentación y Nivelación, etapas que describimos a continuación:


Instrumentación: Período en que recibe las técnicas de instrumentación básica, que son el Sistema de Lectura y Escritura Braille, Cálculo Matemático en Ábaco y Movilidad del Bastón.

Nivelación: Período en que recibe todos los elementos necesarios para una posterior integración, esto es las Asignaturas de Educación Básica en primer ciclo y Orientación Personal y Familiar.

Integración: Período en que el alumno es incorporado a la escuela común, asistiendo en jornada alterna al Centro de Integración para recibir Reforzamiento en Asignaturas, materiales especiales. Además asiste periódicamente al establecimiento común un Profesor Itinerante que asesora a los maestros y observa el desarrollo del alumno.
CASUÍSTICA Y PROCEDIMIENTOS
Este esquema Transición-Integración en la práctica no se da en forma rígida, pues son variadas las situaciones que encontramos. Por lo general, el niño que se matricula en el Centro corresponde a uno de los siguientes cuatro casos:


Caso 1. Ciegos parciales con escolaridad: niños matriculados en la escuela común que presentan problemas de visión.
Caso 2. Discapacitados visuales recientes, con escolaridad: niños que adquieren repentinamente limitación parcial o total, lo cual involucra un problema emocional.
Caso 3. Ciegos totales congénitos sin escolaridad.
Caso 4. Ciegos totales con escolaridad sin asesoría.


Frente al primer y último grupo, parciales y totales con escolaridad, procedemos de manera similar al no segregarles, puesto que generalmente ya están adaptados socialmente al colegio común. Sólo se les somete a un periodo de apoyo pedagógico intensivo en el Centro de Integración, en jornada alterna.


En cambio, al segundo grupo, de los discapacitados visuales recientes, se les somete a un período de readaptación e instrumentación básica en forma segregada en el Centro.


Los niños del tercer grupo, totales sin escolaridad, deben pasar también al curso de instrumentación. Los primeros años son decisivos en la formación de la persona y es cuando más afecto y seguridad necesita. De allí que el periodo de Transición sea fundamental para el desarrollo futuro del niño ciego integrado. El tiempo que permanezca en esta etapa dependerá del desarrollo individual y de sus rasgos particulares. La experiencia nos ha demostrado que no es bueno apresurar la incorporación de un niño a la escuela común, como tampoco prolongar demasiado su segregación.
OBJETIVOS DE CADA CURSO
Los objetivos a lograr en cada Curso o Nivel del Centro de Integración de Ciegos, son los siguientes:


Curso o Nivel de Instrumentación:

1) Proporcionar al discapacitado visual las técnicas de Instrumentación Básica de lectoescritura Braille, cálculo en Abaco y Movilidad con bastón.
2) Proporcionar al discapacitado visual Orientación Personal para la aceptación de su déficit y conocimiento de sus verdaderas limitaciones.


Curso o Nivel de Nivelación:
Proporcionar al discapacitado visual:
1) Una adecuada nivelación pedagógica desarrollando las conductas, habilidades y destrezas que plantea el programa de estudio vigente en la educación común.
2) Orientación Personal en cuanto a relaciones familiares e interpersonales con pares normovisuales y preparación afectiva para una posterior integración a la escuela común.


Curso o Nivel de Integración:
Proporcionar al discapacitado visual integrado:
1) Reforzamiento en las asignaturas que le estén causando dificultad.
2) Apoyo en material bibliográfico en Braille y sonoro y material en relieve y tridimensional.
3) Orientación Personal para un conocimiento de su personalidad, intereses, aptitudes y expectativas que el medio ofrece para una futura integración laboral.
PRE-REQUISITOS PARA LA INTEGRACIÓN
No sólo hay un individuo ciego, sino que toda una sociedad que actúa frente a él enceguecida por una imagen prefabricada de éste. El obstáculo que tienen que vencer las personas ciegas, además de sus propias limitaciones, es la imagen que la sociedad ha hecho de ellos como seres incapaces. El niño discapacitado visual debe poseer los rasgos sicológicos mínimos de autoestima y equilibrio emocional para poder enfrentar un grupo de niños normovisuales y profesores que lo estigmatiza y en ocasiones es cruel.


La limitación visual involucra algo más que limitaciones en el desplazamiento, control del ambiente y en la adquisición de cultura. En el caso del ciego adquirido por enfermedad o accidentes son lesionadas las emociones, el concepto del mundo y de la vida, se origina un trauma que debe ser superado, una herida que debe sanar. La ceguera deberá llegar a constituir en la persona una característica más, una barrera que se pudo saltar con madurez y auto respeto.

Estimamos nuestro trabajo integrador sumamente delicado. Integrar al ciego a la escuela común es nuestro propósito y lo hacemos cuando él está en condiciones pedagógicas y sicológicas para hacerlo. Para ser integrado a la escuela común es indispensable que el niño posea:

Las conductas de entrada del curso al cual será integrado son, a nuestro juicio, las siguientes. Para este efecto el niño es sometido a una acuciosa evaluación.

a) Dominio de Movilidad: que el niño sea capaz de desplazarse en el aula y en la escuela con soltura, independencia y sin temor.
b) Dominio de la Lecto-escritura Braille.
c) Dominio del Cálculo en Abaco.
d)Condiciones sicológicas básicas: aceptación de la ceguera, estabilidad emocional, adaptación al grupo e independencia personal.
PASOS AL INTEGRAR UN NIÑO CIEGO
Para la elección de la escuela donde el niño será integrado se han seguido dos criterios. Uno es matriculado en la escuela más cercana a su hogar y otro es hacerlo en una escuela cercana al Centro de Integración.


Esta última estrategia nos ha llevado a concentrar un mayor número de niños en un sólo colegio, lo cual hace mucho más fácil nuestra labor de orientación a profesores y alumnos, pues ya se ha creado un clima bien dispuesto hacia el niño discapacitado visual, sin sobreprotección, disciplinado y exigente.

Los pasos a seguir son:
1) Conversación con la Dirección y Jefatura Técnica de la escuela común.
2) Entrevista con el Profesor jefe, conociéndose horarios y modos de trabajo, llegándose a acuerdos sobre entrega de grabaciones, transcripciones, materiales didácticos y asesoría.
3) Charla al profesorado sobre modo correcto de tratar al ciego, verdaderas limitaciones y capacidades del ciego, principios de la educación integrada y labor del Centro de Integración.
4) Conversación con los alumnos del curso, previa a la incorporación del niño ciego al aula, sobre el modo de tratar al ciego, el sistema Braille y cómo aprenden los ciegos.

Otro paso importantísimo antes de incorporar un niño al colegio común es establecer un acuerdo claro con la familia, la cual deberá tener cierta madurez en su trato hacia el niño, esto es que evitará actitudes sobreprotectoras, exigiendo tanto al niño como a sus hermanos. Además deberá tomar su responsabilidad de ayudarlo en estudio, tareas y trabajos, no descansando plenamente en la labor del Centro. Por último deberá estar dispuesta a tomar su responsabilidad económica frente a los estudios del niño. Es común que los familiares piensen que es deber del Centro y comunidad solventar los gastos en educación y útiles especiales del limitado visual, mas esta actitud no debe ser permitida pues es la familia la primera responsable del niño.
DIFICULTADES A LAS QUE SE ENFRENTA EL NIÑO CIEGO INTEGRADO
La gran dificultad a la que se enfrenta el niño ciego integrado es de orden sicosocial. El niño se ve objeto de las diversas actitudes con que reacciona el normovisual frente a las personas discapacitadas visuales: temor, excesiva protección derivada de la lástima, curiosidad. El miedo lleva a sus compañeros a alejarse de él y aislarlo, mientras la curiosidad y lástima los hace agruparse en torno a él y acosarlo en atenciones y preguntas.


El niño ante esto muchas veces se siente cohibido. Hay dos maneras de reaccionar frente al grupo normovisual: en forma activa o en forma pasiva. La reacción activa es la más positiva para la integración; el niño se comunica, opina, actúa, toma decisiones, busca soluciones, propone. Este es un niño que incluso, por su valentía al enfrentar las dificultades del medio, adquiere una mejor movilidad espacial.

En segundo término están las barreras para el aprendizaje: el ciego no se percata de lo escrito en la pizarra, los textos son para personas que ven, el profesor utiliza láminas y mapas, debe realizar experimentos en Ciencias Naturales, las Artes Plásticas son eminentemente visuales, las órdenes en Educación Física van acompañadas con gestos, etc. O sea, hay un gran cúmulo de información que el niño ciego no recibe, lo cual lo va limitando en su participación en el aula y en la adquisición de contenidos y objetivos.

Todas estas dificultades son superadas en gran medida por una adecuada asesoría del Centro de Integración, a través de la Biblioteca, el Profesor Itinerante y el Profesor Consultor, además de la instrumentación básica y nivelación educacional que el niño ya debe poseer.

La participación activa del estudiante ciego integrado a la escuela común dependerá entonces de los siguientes factores:
1) Grado de socialización y desarrollo emocional.
2) Desarrollo sicomotriz y movilidad.
3) Preparación del medio escolar y familiar.
4) Grado de instrumentación y nivelación previa
5) Disposición de elementos didácticos adaptados.
6) Asesoría del profesor itinerante.
7) Reforzamiento y apoyo del Centro
COMO SUPERAMOS ESTAS DIFICULTADES
Pensamos que, para una óptima integración educativa y social de los discapacitados visuales, es fundamental la existencia de un Centro de Integración, institución base donde se centralizan las acciones, estrategias y recursos para la formación integral e integrada del discapacitado visual y la orientación de la familia y la comunidad.


En este Centro juegan un rol fundamental la Biblioteca, el Profesor Itinerante y el Profesor Consultor.
Los objetivos de la Biblioteca y Cintoteca son: a) Organizar el material bibliográfico y didáctico (libros en tinta, Braille y sonoros, láminas en relieve y tridimensionales) de manera de hacerlo accesible al usuario; b) Prestar apoyo en material bibliográfico y didáctico a discapacitados visuales y docentes, c) Elaborar material bibliográfico y didáctico; y d) Promover la cultura mediante charlas, exposiciones y todo tipo de actividades culturales.

Para la elaboración de materiales se han estructurado la Unidad de Transcripciones, la Unidad de Grabaciones y la Unidad de Materiales Didácticos. Todo el trabajo de Biblioteca es efectuado con la colaboración del Voluntariado del Centro.

El Profesor Itinerante es aquel docente que visita las escuelas donde hay niños discapacitados visuales integrados, a objeto de: a) Asesorar técnicamente al profesorado común en cuanto a metodologías y evaluación del estudiante discapacitado visual; b) Detectar dificultades y progresos en el proceso de integración del estudiante ciego integrado; c) Recoger y entregar materiales especiales (transcripciones, grabaciones, materiales didácticos, etc.)

El Profesor Consultor es aquel docente que atiende en un horario flexible, en jornada alterna en el Centro de Integración, al niño ciego integrado a objeto de: a) Entregar Reforzamiento en Asignaturas de dificultad; b) Entregar Instrumentación en técnicas más avanzadas, como Estenografía, Signografía Científica, Dactilografía, etcétera; y c) Entregar Orientación Personal
RESULTADOS OBTENIDOS
La experiencia realizada en el Centro de Integración ha sido con niños y jóvenes integrados a la Educación Básica, Media y Universitaria; y con adultos discapacitados visuales en un proceso de rehabilitación. Entendiendo que donde más claramente podrán apreciarse resultados, pudiendo llegarse a conclusiones más o menos sólidas en el futuro, es en los niños y jóvenes, gradualmente el énfasis de nuestro trabajo se ha ido volcando hacia ellos.


Hemos intentado describir en detalle la operacionalización de la Integración, sin abarcar el trabajo con adultos, en el cual intervienen otras variables, constituyendo una problemática tan compleja como ésta.

A continuación se exponen algunas conclusiones a las que hemos llegado en nuestra experiencia con niños discapacitados visuales integrados a la Educación común:

1. El éxito de la Integración de un discapacitado visual dependerá principalmente de la calidad de la Instrumentación Básica y Nivelación Pedagógica, recibida en forma previa a su incorporación a la escuela común y si cuenta con el apoyo pedagógico de un sistema diseñado con este fin, que en nuestro caso es el Centro de Integración
2. Este sistema de apoyo debe ser lo suficientemente flexible para adaptarse a la multiplicidad de situaciones individuales.
3. Este sistema debe contar con un Profesor Itinerante que oriente el proceso de integración en la escuela común.
4. La integración de discapacitados visuales requiere de una bien organizada Biblioteca que provea a alumnos y profesores del material bibliográfico y didáctico adecuado. Para esto es indispensable el concurso de voluntariado capacitado que realice las grabaciones, transcripciones y materiales didácticos.
5. Es fundamental el papel que juega la familia en la integración del discapacitado visual. Si no existe de su parte la disposición y formación adecuadas, el niño no logra un buen desempeño. Por eso el sistema de apoyo debe contar con un Programa de Escuela de Padres.
6. Naturalmente realizar Educación Integrada sin estos recursos será sumamente difícil, si no imposible. La Educación Integrada no puede sustentarse en una sola persona o tipo de profesional. Es un trabajo de equipo, en el cual cada función es importante y necesaria. Se requiere tanto del educador, de la familia, asistente social, sicólogo, bibliotecario, voluntariado, etcétera.
7. No todos los discapacitados visuales pueden ser integrados a la escuela común, como aquellos que presentan otro déficit.
8. No todos los niños podrán continuar en la Enseñanza Media, por razones de capacidad, interés o situación socioeconómica. Para estos niños debiera buscarse otras alternativas, como la creación de un Multitaller, con el propósito de explorar intereses y desarrollar habilidades y destrezas manuales básicas para ser posteriormente incorporados en un Taller de Capacitación, o bien integrados a un Centro de Capacitación Laboral.

Para finalizar diremos que, tanto para los discapacitados visuales, sus familias, compañeros de estudios, profesores y comunidad en general, la integración ha sido fuente de múltiples vivencias, que nos han llevado a un mejor conocimiento de todos.

El desafío de integrar niños ciegos a la Escuela Común significa desplegar una serie de esfuerzos para la obtención de recursos como para provocar cambios de actitud hacia los discapacitados visuales, a lo cual, la comunidad ha respondido solidariamente.

Creemos que la integración educativa del ciego es un paso más hacia nuestra meta común, que es su integración social plena.

Finalmente, para quienes hemos trabajado en esta experiencia, la intercomunicación ciego-normovisual ha sido altamente enriquecedora, pues nos ha llevado a conocer mejor a los discapacitados visuales, promover el cambio de actitudes en padres y maestros y enfrentarnos con nuestras propias limitaciones y capacidades.
BIBLIOGRAFÍA
Un punto de vista sobre la Educación Integrada para niños ciegos. Dr. Franjo Tonkivic, Revista Nº 36, Río de Janerio, marzo 1968.
Artículos sobre Educación de niños ciegos, Georgie Lee Abel, AFOB, 1964.
Conclusiones finales de las I Jornadas de Estudio sobre Educación Integrada del Limitado Visual, Viña del Mar, 16 al 18 de junio, 1977.
Mención Trastornos de Visión, Simposium de Educación Diferencial, Viña del Mar, 24 al 28 de septiembre de 1980.
Educación Integrada para el Limitado Visual, Angel Palma Tapia, Revista de Educación y Cultura Nº 7, Viña del Mar, 1980.
Programa Tentativo para la Atención del Limitado Visual en la V Región, Eugenio Gómez B., Angela Palma T., Iván Tapia C., 1976 a 1978.
Plan Quinquenal de Educación Integrada del Limitado Visual, Secretaría Ministerial de Educación de Educación Regional Valparaíso, 1980.

GUÍA PARA INTERACTUAR CON PERSONAS CIEGAS
Iván Tapia Contardo
Especialista en Educación de Ciegos (U.Ch.)
Si usted ha decidido servir como acompañante de personas ciegas, ha tomado una buena iniciativa solidaria, la cual podrá satisfacer la gran necesidad de compañía, comunicación, información y afecto que gran parte de estas personas requieren. Le felicitamos y agradecemos, en nombre de los atendidos, por esta noble acción. Estamos seguros que le reportará interesantes experiencias y conocimientos acerca de la vida, desde la perspectiva de la ceguera. Sin embargo no basta con su buena voluntad o intención de ayudar; hay que estar preparado/a para un intercambio adecuado y que sea efectivo en cuanto al servicio que ellos requieren. Con este propósito se ha elaborado la presente Guía para interactuar con personas ciegas.

Conducta de los ciegos. No existe propiamente una Psicología del Ciego, sino más bien una serie de actitudes con que todo ser humano responde ante la Ceguera o falta de visión, dado lo relevante que es para los normovisuales el manejo del sentido de la vista. La carencia de visión genera en el que padece ceguera fuertes sentimientos de inseguridad, incapacidad para controlar el ambiente, desvalorización frente al que ve, desinformación cultural, aparte de las dificultades propias en el desplazamiento y manejo de información visual. Por otra parte, los prejuicios de la sociedad ante el que es diferente, su falta de conocimiento respecto a las verdaderas limitaciones de los ciegos y de sus grandes capacidades remanentes, junto a la ausencia de una actitud realmente comprometida con sus derechos, produce en la persona ciega muchas veces reacciones negativas.

Ideas erróneas acerca de los ciegos. Cada individuo ciego es antes que nada una persona con su propio temperamento y carácter, con una personalidad que lo define distinto a los otros. No podemos asegurar que los ciegos son, piensan o sienten de determinada forma, ni que todos los ciegos tienen los mismos intereses -la Música y el Derecho- o idénticas aptitudes -memoria, oído y tacto-, puesto que si comparamos a un grupo de personas ciegas nos encontraremos con los más variados gustos, capacidades y caracteres. En el trato con ellos deberíamos renunciar a aquellos estereotipos que hemos aprendido erróneamente y enfrentarnos a la persona.
Conociendo a la persona. El primer paso para interactuar con un hombre, mujer o niño/a ciegos, es deshacerse de tales preconceptos ("los ciegos tienen su mundo", "pobrecito", "qué terrible no poder ver una puesta de sol", "los ciegos son mal humorados", etc., etc.) y lanzarse a conocer a la persona que hay tras esos lentes oscuros y que porta un bastón blanco. Conocerle es una maravillosa experiencia que le invito a realizar. Se encontrará usted con alguien que tiene, al igual que todos nosotros, anhelos, expectativas, deseos, frustraciones, fortalezas y debilidades, cualidades y defectos.

Actitud sincera del acompañante. El primer contacto es crucial, acérquese con respeto y sin temor, póngase a su servicio. No se ubique como superior; el poseer un sentido más que ellos no nos hace mejores ni más fuertes, puesto que la seguridad y capacidad de la persona humana se sustenta en una visión interna, coherente y positiva, de la vida. Muchos normovisuales están lejos de haber alcanzado tal "visión". Él o ella percibirá su afecto e interés sincero en colaborarle y rechazará cualquier intento de menoscabo, como la sobreprotección. Como nosotros, ellos también quieren ser autovalentes, aún cuando hay algunos que han aprendido a utilizar nuestras actitudes proteccionistas a su favor.

Etapas en la Rehabilitación Psicológica. No sólo hay un Psicología para cada persona portadora de ceguera, sino también actitudes determinadas por la etapa en que esta se encuentra en cuanto a su Rehabilitación Psicológica. La persona ciega atraviesa distintas etapas, las cuales no tienen un tiempo ni unas características absolutamente uniformes. Para cualquier individuo, perder la vista o que nazca alguien ciego en la familia, es un hecho muy impactante y traumático. Un primer estado es el de la crisis o schock, luego un período de profunda depresión, para llegar por último a la aceptación de su déficit.

Etapa de Crisis. El estado de schock es una especie de adormecimiento psíquico. La persona atina a nada, no llora ni ríe, cae en el mutismo pues le ha impresionado tanto esta pérdida de sus ojos que no sabe como reaccionar, hasta que toma conciencia en pocas semanas de su nueva condición.

La depresión o duelo. Se sumerge entonces en un estado depresivo tal que sólo quiere morir. Muchas veces en esta etapa intentan suicidarse, reaccionan con violencia, quieren estar solos. Quienes les rodean en esos instantes deben tener mucha comprensión y darse cuenta que las palabras de consuelo poco podrán hacer por ella, pero sí es muy importante que sienta la amorosa compañía de otros junto a ella. En verdad llora la pérdida de su vista y de toda una vida funcionando de acuerdo a ciertos esquemas. Pensemos que tendrá que aceptar su nueva condición de ciego para poder iniciar cualquier aprendizaje rehabilitativo.

Aceptando su nueva condición. El proceso de aceptación de la ceguera por parte del ciego es como un nuevo nacimiento. Mientras la persona no comprenda que la persona con vista o normovisual que era ya ha muerto, no podrá manifestarse la nueva persona, ciega pero con grandes capacidades de readaptación. Aplicando este principio a la rehabilitación de las personas ciegas, podemos decir que en tanto el ciego no renuncie psicológicamente a su antigua vida de persona con vista, no podrá volver a vivir como persona ciega rehabilitada. El aprendizaje del sistema Braille, el uso del bastón, el método de cálculo mediante Sorobá y todas las técnicas que le permitirán desenvolverse normalmente en el medio, pasa por esta toma de conciencia de su nueva vida y la aceptación de esa condición.

Sea un buen oidor. En su contacto con la persona ciega usted probablemente observará algunas de las conductas relatadas anteriormente. Frente a ellas no haga nada, sólo escuche y observe; usted no está capacitado/a para rehabilitar, dar orientaciones o consejos. Deje esta tarea a los especialistas y brinde su parte: el afecto, la comprensión, la compañía, la ayuda práctica necesaria. Una opinión o "consejo" inadecuado podrían suscitar problemas mayores en la persona ciega.

No tome el rol del consejero. Superar cada etapa nombrada en algunos casos se vuelve doloroso, ya que implica un cambio en la autoimagen y renuncia a cánones visuales y de comportamiento que estorban a su Rehabilitación. Quizás la persona querrá confidenciar con usted sus sentimientos y drama personal. Escúchela y ofréscale su amistad, dándole seguridad y confianza en sus propias decisiones, pero no opte la posición de consejero/a.

Ayude en forma práctica. Concéntrese en el plano de sus necesidades funcionales tales como: acompañarle donde una amistad, ir de compras, hacer alguna diligencia, grabación de temas de interés, lectura de una novela de su gusto, transcripción al braille de un poema o reflexión bonita, cocinar juntos un plato diferente, darle su opinión sobre vestuario, etc. etc. preocúpese de todo aquello que puede mejorar su calidad de vida. Para cada ayuda que usted quiera darle consulte y jamás la imponga. Este trabajo requiere de humildad y mucha comprensión y respeto hacia la intimidad de la persona.

Siga siendo acompañante. Mantenga cierta distancia emocional con la persona ciega, para no perder su objetividad y conservar la posición de "acompañante". No es la idea de este servicio involucrarse sentimentalmente con la persona ciega, aún cuando pueda surgir la amistad. Aquí conviene revisar las propias motivaciones del acompañante para que se establezca una sana relación de interacción efectiva. El propósito del acompañante es prestar un servicio integral, afectuoso y humano, tendiente a satisfacer necesidades prácticas de la persona ciega en su vida diaria, que no son satisfechas por la familia ni los especialistas.

Las verdaderas limitaciones del ciego. Existe la tendencia a exagerar los impedimentos de las personas con discapacidad, sobre todo en el caso de los ciegos. Sin embargo, al observar detenidamente su condición, llegamos a la conclusión que las limitaciones se reducen sólo a tres aspectos: desplazamiento, control del ambiente y adquisición de cultura.

Dificultades en el desplazamiento. Basta que usted cierre sus ojos y trate de caminar "a ciegas" hasta la puerta de su hogar, para darse cuenta lo difícil que es para alguien movilizarse prescindiendo del sentido de la visión. Sin embargo la persona ciega, con un buen entrenamiento en Orientación y Movilidad con bastón (o perro guía, en los países del primer mundo) puede lograr una movilidad independiente.

Limitaciones en el control del ambiente. El sentido de la vista tiene la capacidad de abarcar grandes espacios y captar una gran cantidad de información en forma simultánea. Por ejemplo si usted entra en un lugar desconocido se percata de inmediato de la dimensión de ese espacio, color, cantidad de personas, como van vestidos, de que sexo y estrato social son, en fin, unos datos que será muy difícil percibir con los ojos cerrados. La inseguridad que siente el ciego o ciega por ese desconocimiento derivado de la carencia de la vista, constituye un grave problema, que puede ser resuelto con una adecuada Educación Especial (en el caso del niño) y Rehabilitación (en el caso del adulto). Ellos son entrenados en la utilización de los "sentidos vicariantes" (oído, tacto, olfato, gusto y sentido de percepción de obstáculos) y en las Actividades de la Vida Diaria para su manejo personal y social.

Adquisición de Cultura. Gran parte de la información cultural de nuestra sociedad es visual: libros, revistas y periódicos son escritos en tinta; el cine y la televisión son eminentemente visuales; las señales en las calles, la publicidad, los escaparates, etc. están diseñados para personas que ven, esto es los normovisuales. Actualmente recibimos a través de Internet todos los contenidos culturales de una sociedad de información. ¿Qué hace la persona ciega para integrarse a este mundo informativo? Aquí es donde el Sistema Braille ocupa un lugar importante en la superación de esta tercera limitación.

Contribuya a superar sus tensiones. Las dificultades nombradas ocasionan frecuentemente gran estrés en la persona ciega, lo que se expresa corporalmente en tensión y dolores musculares; y a veces en reacciones agresivas. Los masajes y ejercicios de relajación, con la ayuda de música; las actividades de recreación y físicas, como la natación, son de gran ayuda en este aspecto. Son interesantes alternativas que puede manejar un acompañante como parte de su programa de servicio.

El mapa mental. Hay un aspecto en el control del ambiente por parte de la persona ciega, que llama bastante nuestra atención cuando comenzamos a interactuar con ellos y es la particular necesidad de limitar o percibir los límites témporo-espaciales, formarse una idea global concreta y clara de los escenarios donde actúan y actuarán. Requieren saber sobre las personas que les rodean, los horarios y calendarios de actividades, los espacios que les circundan y todo tipo de información no alcanzable sin la vista o que les de una estructura psicológica segura en la cual moverse. Esto puede parecer chocante o raro a quien no sabe comprenderlo, pero es lógico si nos ponemos en su lugar e imaginamos movernos en un espacio obscuro sin referencias visuales. Necesitaríamos inventar o descubrir nuestras propias coordenadas.

Sea sus ojos. Usted puede ayudar a la persona ciega a construir ese "mapa interno témporo-espacial", siendo sus ojos cuando camina por la calle (narrando con naturalidad lo que encuentra a su paso; haciendo algunas descripciones; informándole sobre la presencia de alguien conocido que se acerca; contándole sobre algunos cambios arquitectónicos de la ciudad; comentándole algún escaparate, etc.), cuando está en otra casa o institución (comentándole sobre apariencia de las personas, adornos y objetos interesantes, cambios en la disposición del mobiliario, etc.), cuando pasea en lugares públicos como parques, plazas, playa, campo, museos, comercio, etc. y en la conversación (usos y cambios en las costumbres, modas, nuevos esquemas visuales, últimas películas y libros de actualidad, noticias de la televisión, obras de teatro, etc.).

Más consejos. Por último, es recomendable que usted lea, analice y ponga en práctica los CONSEJOS PARA UNA BUENA COMUNICACIÓN CON LAS PERSONAS CIEGAS que adjuntamos a esta guía. Podríamos agregar mucho más, pero es lo suficiente para iniciar una agradable y enriquecedora experiencia como acompañante de personas ciegas.

CONSEJOS PARA UNA BUENA COMUNICACIÓN CON LAS PERSONAS CIEGAS.

Tal vez usted muchas veces ha querido ayudar a una persona ciega y no se ha atrevido a hacerlo por temor a una respuesta agresiva o sencillamente para no cometer un error. He aquí algunos consejos para conocerla y serle útil:

  1. En primer lugar, tenga en cuenta esto. Cuando entre a un lugar donde se encuentra un ciego o ciega, hable aunque sea sólo una palabra de saludo. Es preciso hacerle notar su presencia y también prevenirlo cuando usted se retira.
  2. Jamás se dirija a él por intermedio de otra persona, en los casos en que le pueda hablar libremente. Hágalo con normalidad y asegúrese que él sepa que usted se está dirigiendo a él llamándolo por su nombre, tocándole un brazo o de cualquier otra forma.
  3. No modifique su modo de expresarse para evitar ciertas palabras como "ciego" o "ver". La discapacidad visual es la ceguera y se llama "ciego" a quien la porta. Esto no puede ofenderle y su uso natural por parte de quien la lleva es parte de su aceptación del déficit.
  4. Usted puede utilizar sin temor palabras que hacen alusión a la vista, como "mirar", "ver televisión", "bonito" o "hermoso". A ellos no les molestan estos términos e incluso los usan con toda naturalidad. Por ejemplo: "¿Viste ayer la teleserie?" refiriéndose a escuchar la novela por televisión.
  5. Cuando se encuentre con él o ella, pregúntele si desea que lo acompañe pero no insista si dice que puede arreglárselas solo/a.
  6. Si una persona ciega acepta su servicio, ofrézcale siempre el brazo pues así podrá seguirlo y realizar los mismos movimientos que usted, lo que le será imposible si usted lo toma del brazo y lo empuja hacia adelante.
  7. Cuando cruce una calle acompañando a un ciego, deténgase un momento junto al cordón de la vereda o cuneta, a menos que él prefiera que se le advierta mediante una presión del brazo.
  8. Encare las veredas de frente, nunca en diagonal. Lo mismo rige para las escaleras fijas y mecánicas. No lo abandone hasta que ambos se encuentren sanos y salvos al otro lado de la calle. Permanezca junto a él salvando cualquier tipo de obstáculos, tales como: montículos de arena, escombros, trabajos en la vía pública, bicicletas que circulan por las veredas, etc.
  9. Si usted está apurado/a, pida a alguien que lo reemplace o señálele a la persona ciega brevemente todos los peligros que se encuentran en el camino a seguir.
  10. Para indicarle un asiento, tome su mano derecha y póngala sobre el respaldo de la silla o sobre el brazo del sillón y él o ella sabrá tomar asiento por sus propios medios.
  11. Para subir a un auto, coloque la mano del ciego sobre la manija de la puerta, o si está abierta, sobre el techo del vehículo e indíquele si el frente del auto está a su derecha o a su izquierda. El ciego se ubicará de inmediato en el lugar correcto, sin ninguna otra ayuda.
  12. Para subir una escalera común, colóquele la mano sobre el pasamanos. Si se trata de una escalera mecánica, indíquele si sube o si baja, luego colóquele la mano sobre la cinta sin fin, en el momento que vaya a usarla.
  13. Para pasar por una puerta giratoria: Si el ciego prefiere precederlo, coloque su mano sobre uno de los paneles giratorios para que él se de cuenta de la dimensión del compartimento e inicie el movimiento; si él prefiere seguirlo, hágale saber cuando entra, para que él suelte su brazo y entre a su vez en el compartimento siguiente, pero jamás en el mismo que usted.
  14. Si usted entrega a un ciego billetes de distintos valores, entrégueselos por separado, agrupados por cada valor, identificándolos vez por vez.
  15. Si un ciego le pide una dirección, indíquesela tan precisamente como sea posible, señalándole la distancia a recorrer, si debe doblar a izquierda o a derecha o seguir en línea recta. Si usted es carabinero/a, preséntese como tal, pues él puede tener necesidad de una ayuda de su parte, que no aceptaría proviniendo de otra persona.
  16. Evite especialmente la lástima o una solicitud excesiva. Al acompañarlo háblele como a todo el mundo, ayúdelo discretamente y no insista cuando él le diga que ya no lo necesita.
  17. Si convive con alguna persona ciega en su casa, lugar de estudio o trabajo, procure que las puertas y ventanas estén siempre completamente abiertas o completamente cerradas, e infórmele de los cambios que se produzcan en la ubicación de los muebles.
  18. Cuando se encuentre con un conocido ciego, preséntese por su nombre al saludarlo, no pretenda que él siempre sepa con quién está hablando. Es de muy mal gusto jugar con su ceguera al "adivina quien soy".

Aplicando estos consejos usted estará brindando un gran servicio a las personas ciegas. Recuerde que usted o un ser querido podrían adquirir esta discapacidad por enfermedad o accidente y no les agradaría ser tratados con indiferencia, rudeza ni lástima. Los ciegos son personas con las mismas necesidades que todo el mundo, dependiendo de su edad y ocupación, y desean integrarse normalmente a la vida ciudadana.

PSICÓLOGOS CIEGOS

  Algunos cybernautas tienen interés en saber si una persona con alguna discapacidad visual puede ejercer como psicólogoo/a. Les dejam dejam...